El Atleti es favorito y tiene un pie en semifinales
El Atlético de Madrid ha hecho valer su título de favorito y ha ganado y encarrilado su eliminatoria ante el Sporting de Portugal con un contundente 2-0.
Simeone no guardó nada en el banquillo y salió con su 11 de gala. Los rojiblancos tardaron 22 segundos en hacer el primer gol. Un error de Coates cerca del área fue aprovechado por Costa para dar una gran asistencia a Koke.
No se había terminado de celebrar el primer gol cuando casi llega el segundo. La siguiente acción de ataque terminó en un córner que Godín remató con la cabeza en el segundo palo, obligando al portero portugués a realizar una estirada.
El Sporting poco a poco fueron encontrando su mejor ubicación el el campo. Sobre todo gracias a Piccini que se colaba hasta la cocina en sus acciones por la banda derecha. En una de esas acciones, puso un centro al punto de penalti que Dost no pudo aprovechar.
Oblak fue clave para evitar el empate de Martins cuando se cumplía la media hora de juego. En un contraataque el extremo portugués se plató delante del esloveno que le ganó la partido al meter una mano abajo.
A los dos minutos Griezmann si que no perdonó. Erro de Mathieu que aprovecha el delantero francés para batir en carrera a Rui Patricio. 2-0, justo antes de irnos al descanso, en el minuto 40.
Otro grave error defensivo de los lusos dio casi la sentencia de la eliminatoria pero Diego Costa no fue capaz de aprovechar el error de Coates en la cesión a Rui Patricio.
Los lisboetas pudieron meterse en la eliminatoria con una clarísima ocasión de Bryan Ruiz al final del partido, pero Oblak volvió a ser crucial
A los dos minutos Griezmann si que no perdonó. Erro de Mathieu que aprovecha el delantero francés para batir en carrera a Rui Patricio. 2-0, justo antes de irnos al descanso, en el minuto 40.
Otro grave error defensivo de los lusos dio casi la sentencia de la eliminatoria pero Diego Costa no fue capaz de aprovechar el error de Coates en la cesión a Rui Patricio.
Los lisboetas pudieron meterse en la eliminatoria con una clarísima ocasión de Bryan Ruiz al final del partido, pero Oblak volvió a ser crucial